Reseña TV: In The Flesh (1ª temporada)

Reseña TV es lo que dice su título: mi reseña de un show televisivo, ya sea una serie (lo más habitual), un telefilm o un programa. Soy muy original con los títulos de las secciones.

Tal y como ya os conté en Seen on TV #3, tras  My Mad Fat Diary y Les Revenants a mi santo y a mi nos apetecía ver otra serie juntos, por lo que decidimos darle una oportunidad a esta serie británica sobre la reinserción social de zombies tras leer varias reseñas positivas y por tener una primera temporada de tan solo 3 capítulos.

Sinopsis 

Kieren Walker es un adolescente británico que vuelve a Roarton, su pueblo natal. Sin embargo Kieren no es un chico normal, es uno de los miles de muertos que salieron de sus tumbas para alimentarse del cerebro de personas vivas en un apocalipsis zombie. Sin embargo se ha encontrado un tratamiento para el Síndrome del Parcialmente Muerto, como se ha llamado al fenómeno, para que los afectados se comporten como antes de morir, iniciándose así un plan del gobierno para reinsertarlos socialmente.

Reseña

Ya solo con la sinopsis queda muy claro que In The Flesh utiliza los tópicos del subgénero para sacudírselos y adquirir su propia personalidad. Podría decirse que In The Flesh sería la continuación de cualquier película clásica de zombies o de The Walking Dead. Normalmente las historias sobre zombies se centran en el momento de su aparición y como una serie de personajes intentan sobrevivir a la catástrofe... y aquí es donde entra esta serie de la BBC, preguntándose que podría pasar si hubiera un después y cambiando varias de las reglas del subgénero para poder hacerlo posible.

Como ya he dicho el argumento es la reinserción social de los afectados por el Síndrome del Parcialmente Muerto (SPD a partir de ahora) y las consecuencias que ello conlleva  en el pueblo de Roarton, conocido por ser uno de los más beligerantes tanto al defenderse de los muertos vivientes en el momento en el que se levantaron, como después al posicionarse en contra de su reinserción. Lo interesante de esta serie es que utiliza la excusa de los zombies como metáfora de los problemas sociales actuales.

Esta producción dela BBC explora los radicalismos, el miedo y la exclusión de lo diferente. El pueblo se divide entre los que están en contra de que los "pútridos", como llaman a los revividos, vuelvan a sus casas, ya que para ellos no son más que una bomba de relojería que podría explotar en cualquier momento, y los familiares que ansían reencontrarse con sus seres queridos que fallecieron y revivieron. Los primeros son mayoría, sienten que fueron la única fuerza que defendido al pueblo cuando el gobierno no fue capaz de controlar la plaga zombie y ahora se siente doblemente traicionado por la reinserción y por la perdida de influencia y poder sobre el resto de sus vecinos. Por su lado, los familiares que acogen a sus allegados afectados por el SPD están bajo la presión  de quienes en el pasado lucharon contra los muertos y tienen que acoger a sus seres queridos en secreto, luchando por volver a ser familias unidas. Mientras tanto vamos descubriendo que los afectados por el SPD ya habian sido excluidos en vida, en el caso de Kieran por su homosexualidad o en el de Amy por su excentricidad e independencia en un pueblo tan tradicional y conservador, pero encima ahora deben soportar el peso de lo que hicieron mientras no eran capaces de controlar sus instintos. Esto hace que sea fácil enfocar un drama social que afecta a todo el mundo en un microcosmos como el de Roarton y que se pueda comprender (o empatizar según cada uno) con sus habitantes, sean del bando que sean.

Un detalle que me ha gustado mucho es que pese a que estamos ante un dramón de cuidado siempre hay espacio para algún toque de humor, ya sea cotidiano o bien totalmente absurdo, pero sin exagerarlo y llevarlo demasiado lejos. Eso hace que la serie sea más llevadera.

Por sacar algún defecto, diré que la serie me parece muy poco sutil a la hora de tratar ciertos temas sociales. Pese a que el efecto zombie es una metáfora de ciertos elementos sociales que son excluidos, creo que esta es demasiado directa y poco elegante. Además, tengo la sensación (igual es cosa mía) que los personajes son un poco peleles y que algunas de sus decisiones son un poco veleta, cambiando de idea o actuando de un modo u otro según las circunstancias, pero no de un modo natural, sino según las necesidades de la trama.

En fin... La 1ª temporada de In The Flesh me ha parecido refrescante, no se va a convertir en mi serie favorita, pero se deja ver y resulta muy interesante, aunque creo que los personajes deberían reforzarse ya que a veces me da la sensación que no hacen avanzar la trama, sino que son arrastrados por las necesidades de la historia.

Recomendada a: Quienes no gusten de las historias de zombies al uso.

Lo peor: que no me termino de creer a los personajes en algunos momentos.

Lo mejor: La idea principal es terriblemente original.