Hay películas que narran hechos totalmente cotidianos que me parecen aberrantes, como Barrio de Fernando León de Aranoa (creo que ya he demostrado varias veces mi irracional animadversión hacia la obra de este director), sin embargo hay otras que me conquistan por no cargar las tintas en lo melodramático y parecerme más realistas que otras llenas de pretensiones autorales. Entre estas últimas se encuentra Café Irlandés.
La historia trata sobre como afecta a una familia tradicional irlandesa la noticia de que su hija mayor este embarazada y las consecuencias que ello conlleva tanto en las relaciones familiares como en las sociales, porque la noticia corre como la pólvora entre amigos y vecinos y empiezan a surgir toda clase de rumores y habladurías.
Lo que en manos de Ken Loach hubiera sido un dramón de cuidado que nos hubiera llevado a la indignación por el drama social y a la muerte por deshidratación por llorar, en manos de Frears es una comedia costumbrista malhablada, divertida y entrañable. Evidentemente no falta el momento dramático, pero nunca llega a convertirse en un drama. sino que mantiene un equilibro entre comedia y seriedad. A esto hay que añadirle unos buenos personajes interpretados por unos actores perfectos en su labor y unos diálogos fantásticos.
Recomendada a: Familas que se quieres pese a cualquier adversidad y a los amantes de un cine sencillo y efectivo.
Lo peor: Algún bache en el ritmo, pero por decir algo.
Lo mejor: El reparto y los diálogos. Que evite convertirse en un dramón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por comentar la entrada. Puedes tunear los comentarios con los siguientes códigos: enlazar (a href="url a enlazar") titulo enlace (/a). Escribir en negrita: (b) texto (/b). Escribir en cursiva: (i)texto(/i). Recuerda sustituir ( ) por < >