Hay películas que consiguen que uno se quede embobado frente a la pantalla, maravillado frente a la belleza de sus imágenes. El secreto de Kells (2009), film presente en varios festivales y nominada al oscar como mejor película de animación, es una de ellas.
El secreto de kells es una producción irlandesa-franco-belga que gira alrededor de la creación de El libro de Kells, manuscrito que recoge los cuatro evangelios del Nuevo Testamento y que esta considerado como uno de los más importantes legados artísticos medievales por la gran belleza de sus ilustraciones y miniaturas que acompañan el texto. En la película Brendan, nuestro protagonista, es un niño huérfano acogido por el abad del monasterio de Kells, quien se desvive para terminar de construir una gigantesca muralla alrededor del monasterio y del campamento de refugiados para poder proteger los textos sagrados y a toda la gente que a acudido a él del futuro ataque de los salvajes vikingos. Pero la vida del inquieto Brendan cambia el día que el hermano Aidan llega a Kells huyendo de los vikingos con un misterioso libro. A partir de ese momento la pasión que Brendan siente por los libros hará que deje atrás sus miedos y viva una gran aventura.
La historia de la película es bien simple, demasiado, y no termina de dejar de lado ciertos molestos tics del cine infantil y familiar (como la mascota cómica), pero aún así no provoca el rechazo y estas pendiente de la película, sobretodo en las apariciones de Ashley, ser mitológico celta lleno de carisma y ternura, pero que también resulta majestuoso o intimidatorio cuando debe serlo. Además, tiene un mensaje esperanzador sobre la transmisión de la cultura para acabar con los miedos (reales e infundados) y la violencia, así como para desarrollarnos como seres individuales, pero también como sociedad.
Donde realmente destaca la película es en su concepción visual, una auténtica delicia en 2D, una obra de arte que auna elementos del arte medieval (aquí no hay profundidad y la línea se convierte en la protagonista) con elementos del cartoon moderno provenientes de Las supernenas o de El laboratorio de Dexter. Aunque va más allá, la elección de los colores, los encuadres, todo tiene un significado concreto (ese cielo rojo antes del ataque de los vikingos), consiguiendo que cada plano tenga un significado en si mismo, huyendo de la simple funcionalidad, y dotando de riqueza a la historia, la cual llega a estar en algún momento sometida al aspecto visual. Y eso sin olvidar de una bella banda sonora celta que acompaña siempre y apoya a las imágenes perfectamente.
En fin, es cierto que película peca de contar una historia demasiado simple y esquemática, pero su concepción visual es tan bella que se le puede perdonar todo.
"...o iré a por ti".
LA tendre que ver, aunque si no huviera leido su entrada, con ver el trailer no me huvieran dado ganas de verla
ResponderEliminarYo la conocí por Pedro Fuertecito, que la mencionaba en su Facebook y es un tío al que tengo muy en cuenta en lo que a películas de este estilo se refiere. Pero me chocó, porque decía (si mal recuerdo) que, a veces, los dibujos eran feos... cosa que no me pareció ni remotamente, a tenor del trailer. La veremos.
ResponderEliminarCorlecs: Pues te aseguro que te gustará.
ResponderEliminarcaotico_jq: Bueno, creo que ya dejo ver en la entrada que el dibujo no me parece feo precisamente. Sin embargo si que es cierto que es un estilo difícil y que ciertos diseños son feos por la necesidad de transmitir una sensación terrorífica o inquietante.
Me parece una preciosidad el diseño de espacios y personajes. Totalmente retro.
ResponderEliminarDesde luego tiene buena pinta y el dibujo me parece muy atractivo, no es el típico de Pixar o Disney. Este verano pude ver unas láminas del Libro de Kells en el museo-biblioteca del Trinity College de Dublin y eran impresionantes. Aprovecho para desearle Felices Fiestas, Sr. Nocivo. Borgo.
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