Entre unos que se van (Igartiburu) y otros que vuelven (Alaska y Mario), José Mota se queda donde esta.

Pues sí, corazones, la Igartiburu se nos queda sin programa por falta de audiencia; audiencia que ya no tenia en su anterior etapa con otros presentadores y otros contenidos, así que puede que la culpa no sea porque la rubia de TVE1 este oxidada, tal y como le dijo la Marilo, esa señorona que campa a sus anchas en las mañanas del mismo canal haciéndose la simpática pero enseñando los dientes a la mínima. ¿La razón? Pues según los señores de La1 es que por culpa de +Gente la segunda edición del telediario tiene poca audiencia, ya que el programa de la Igartiburu se lo espantaba. Insisto, no creo que la culpa la tenga Anne, nuestra Anne porque casi la hemos visto crecer, sino un programa que ya estaba muerto desde la temporada pasada y que en ocasiones era demasiado ridículo como para que la gente lo tomara en serio, como muestra el estúpido comportamiento de los colaboradores de nuestra Anne cuando actuó la coreana Andamiro:

Mi reacción ante el peinado de Josemi (y su presencia en general), el nulo trabajo de asesoramiento y la falta de previsión con la traductora entrando media hora después. Ni el Hormiguero en su mejor época, macho.

Y mientras un programa se va, otro que vuelve: Alaska y Mario, o la gallina de los huevos de oro para la MTV spain hasta la llegada de Gandia Shore. No se puede negar que hasta que nació este docureality (por no llamarlo directamente sitcom) el excanal musical se estaba comiendo literalmente los mocos en su emisión en abierto en España. Hay que admitir que la primera temporada, que giraba alrededor de los preparativos de la boda de la pareja, fue genial. Sin embargo los primeros capítulos de la 2ª perdió fuelle porque era más de lo mismo, menos mal que luego las cámaras se dedicaron a seguirles en su viaje de bodas, volviendo a ganar frescura y fuerza. Es cierto que gracias a Alaska y Mario hemos descubierto a unos personajes geniales, porque Mario (esa señora que se hace la tonta mientras bebe cerveza, come cortezas y se quita costillas para estar más delgado) y sus Nancys nos han dejado momentos para la posteridad; sin embargo me preocupa esta tercera temporada, que según dicen estará centrada en la vida laboral de la pareja (la promoción del nuevo disco de Alaska y el proceso creativo del nuevo libro de Mario), porque puede que pase como al principio de la segunda temporada, que la cosa decaiga. Tengamos paciencia para ver que pasa.

Y entre uno y otro, José Mota se queda como esta; porque pese a que su nuevo programa para el grupo mediaset no haya conseguido ni de lejos las audiencias de su etapa en TVE1, han decidido darle una segunda oportunidad en forma de segunda temporada. Sus fans se alegrarán y quien no quiera verlo seguirá pasando de él.

Y en cuanto a nivel internacional (osea, EE.UU.) solo tengo dos cosas que decir: 

1._ Espero que si la adaptación serializada que Guillermo del Toro prepara del manga Monster para la HBO llega a ver la luz este a la altura no ya de la obra original, sino de su anterior adaptación para televisión en forma de 74 capítulos de 25 minutos en los que la tensión y el drama crecían a cada nueva entrega. Este thriller era carne de serie de TV, pero siempre y cuando se mantengan fiel y no nos cambien la ambientación centroeuropea por la America profunda, la 2ª Guerra Mundial por la guerra de secesión y al japones Tenma por un american heroe.

2._ TNT emitirá la segunda temporada de Dos chicas sin Blanca (2 Broke girls), así que preparemonos para más chistes sobre las (enormes) tetas y la vagina de Kat Dennings entre comentarios racistas, escenarios de cartón piedra y modernos con gorros de lana en pleno verano.