Minirreseñas de cine #1

Sección para agrupar varias películas y comentároslas en reseñas cortitas.

¡Nueva sección que me he sacado de la chistera! ¡Porque yo lo valgo! Venía ya tiempo dándole vueltas a agrupar las reseñas de varias pelis pero me resistía, porque a mi lo que me mola es enrollarme como las persianas -¿qué os voy a contar a vosotros que no sepáis?-, pero se me amontonan demasiadas pelis y tras la crisis postvacacional de la semana pasada me he decidido hacerlo de una vez. Si os gusta el resultado -y a mi, que soy quien manda aquí- seguiré con esta sección.

El exótico Hotel Marigold (John Madden, Reino Unido, 2011)

Ya os comente con Las chicas de la sexta planta que hay un tipo de cine que se me atraviesa mucho: ese que va de buen rollero pero que en realidad esconde un subtexto muy poco políticamente correcto, y eso le sucede a El exótico hotel Marigold.

Lo que nos cuenta le película es como un grupo de británicos de edad avanzada se mudan a una residencia en la India en busca de una segunda oportunidad, pero bajo el buen humor y la ternura que desprende en muchos momentos -no voy a negar que es agradable de ver y que tiene un buen equilibrio entre drama y comedia-, en realidad no es más que una historia que se sustenta en el choque cultural entre los refinados y acomodados occidentales y un país muy colorido, muy bullicioso y lleno de vida pero más pobre, al que los inglesitos se mudan con el afán colonialista de quien se cree superior.

Recomendada a: quien quiera algo ligerito y amable -para con los europeos-

Lo peor: lo previsible que resulta y el retrato de la India como un país muy colorido pero atrasado y aún bajo el yugo británico.

Lo mejor: el reparto.

Una conversación cualquiera entre Judy y Bill.

Why  don't You Play in Hell? (Sion Sono, Japón, 2013)

¿Qué pasaría si se hiciera una peli japonesa al estilo Tarantino? Pues que se rodaría esta Why Don't You Play In Hell?, así de simple, lo cual es rizar el rizo, porque Tarantino no suele esconder la influencia que el cine nipon tiene en su manera de entender el séptimo arte.

La peli de Sion Sono es una carta de amor exagerada, histriónica, loca e histérica al cine. Sus personajes son capaces de dar hasta su última gota de sangre, literalmente, por llevar a cabo su sueño de rodar una película y si el cine japonés ya de por sí puede llegar a ser bastante peculiar, si encima busca reflejarse en el de Tarantino, el resultado es una película que salta de un género a otro de un modo tan arbitrario como sorprendente para terminar derivando en una larguísima secuencia súper gore tan bien rodada como excesiva y agotadora.
En el fondo esta Why Don't You Play In Hell? es una reflexión sobre lo mejor -la felicidad que puede transmitir una película a sus espectadores- y lo peor -los tejemanejes detrás de la industria- del cine interesante pero demasiado autoconsciente.

Recomendada a: los fans del cine japonés más alocado y, en este caso, con reflexión metaficcional.

Lo peor: no es para todos los públicos.

Lo mejor: la reflexión llena de mala baba sobre la industria del cine.

Así me imagino al director mientras rodaba la peli.

La parte de los ángeles (Ken Loach, Reino Unido, 2012)

No se si La parte de los ángeles es una película de superación personal, de crítica social, de robos, una comedia absurda o un drama. Así de simple.
Ken Loach y Paul Laverty no parecen decidirse por un género y deciden coger un poco de cada e intentar salir lo más indemne posible. El problema es que quien mucho abarca poco aprieta y las buenas ideas, que las hay, especialmente en la primera mitad de la película, se van al traste cuando el protagonista, que de repente es un hacha en esto de catar whisky y de una semana para otra se ha convertido en un experto en esta bebida, decide crear una banda y robar un whisky muy raro para revenderlo a precio de oro.
Total, que la película empieza bien y termina siendo un pequeño despropósito, simpático, vale, pero un despropósito inverosímil y que se queda en nada.

Recomendada a: fans del cine social británico con toques de comedia.

Lo peor: que según avanza va perdiendo sentido.

Lo mejor: la primera parte de la película y el reparto.

El diálogo que me faltó a lo largo de la peli.