O al menos eso es lo que nos hace creer en sus fotografías, en las cuales podemos verla levitar en diferentes espacios urbanos de Tokyo. Lo curioso es que las fotografías son autoretratos. La verdad es que las instantáneas me han encantado, sobretodo en las que se ve a la fotógrafa rodeada de otras personas en actitudes de lo más cotidianas, creando un fuerte contraste entre ella y su ingravidez y el resto de la gente, esclavizada a la fuerza de la gravedad.
Pueden ver más de sus fotos en su blog personal: http://yowayowacamera.com/ o en http://www.gizmodo.es/2011/06/25/la-japonesa-que-siempre-sono-poder-levitar.html, http://www.mymodernmet.com/profiles/blogs/the-girl-who-loves-to-levitate y http://www.thefatpixel.com/la-chica-que-amaba-levitar/
Muy bonitas, parecen sacadas de o hechas para un cuento
ResponderEliminarLa del restaurante es total. Es la que más parece una tía volando, en vez de una tía saltando.
ResponderEliminarSon estupendas, a mi me parece genial la de la aspiradora. Eso sí, tiene dos buenos muelles en las piernas por lo que se ve.
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