Reseña cine: Vivir para gozar (George Cukor, EE.UU., 1938)

Rincón para compartir mi opinión de las películas que veo en cutre reseñas súper pedantes. Porque yo lo valgo.

Mira que me gustan a mi las comedias románticas del Hollywood dorado, con esos diálogos rápidos y los gags visuales bien preparados y mejor resueltos. Cuando me dispuse a ver Vivir para gozar (Holiday en el original), creía que iba a ver una screwball comedy romántica con Cary Grant y Katharine Hepburn, pero resultó que me encontré con una comedia que critica el gran sueño americano.

Sinopsis

Johnny Case (Cary Grant) es un vividor pero en el buen sentido: ha estado trabajando toda su vida para poder retirarse pronto y disfrutar del tiempo que le quede. En uno de sus viajes ha conocido a Julie Seton, hija de una acaudalada familia y que ha decidido que Johnny debe dejar su sueño y trabajar en uno de los bancos de su padre. La única que le comprende es Linda (Katharine Hepburn), la excéntrica hermana de su futura esposa que le anima a no abandonar sus sueños.

Opinión

Pues lo dicho, que esperaba una comedia romántica y lo que me he encontrado es una película que pese a su ligereza critica al sueño americano, abofeteando desde Hollywood a las altas esferas sociales (tan banales, superficiales e interesadas) y su necesidad por aparentar y tener el control de todo lo que puedan.

Así pues la peli enfrenta al carismático Johnny y a sus amigos los Potter con los encorsetados Seton. Evidentemente el conflicto estalla, porque mientras Jhonny prefiere vivir tranquilo y feliz sin preocupaciones ni agobios, su futuros esposa y suegro solo piensan en el dinero, su posición social y en que se codee con la creme de la creme de la sociedad neoyorkina.

Los miembros de la familia Seton aparecen como personas corrompidas por el dinero y las convenciones sociales, quedando algunos de ellos rotos al no poder soportar el yugo que supone el apellido ni unas relaciones sociales marcadas por la superficialidad y el interés en vez de por el afecto. Por su lado Johnny y sus amigos los Potter aparecen como personas sencillas y felices, algo superadas por la forma de vida de los Seton.

Por supuesto la película toma partido por estos últimos y poco a poco vemos como esos miembros de los Seton se van sincerando con Johnny y los Potter, mostrando sus debilidades y sus anhelos en escenas que llegan a ser muy tiernas, especialmente cuando el hermano de Linda y Julie toca varios instrumentos de juguete en su vieja habitación de juegos. Pero por otro lado no llego a convencerme por completo como comedia. En otras películas cómicas de la época es imposible no reírse, pero Cukor esta tan pendiente de lanzarnos discursos sobre lo necesario que es ser feliz para vivir una vida plena que llegó a cargarme un poco. 

Pero lo que me remató es el final. Evidentemente gana el bando que debe ganar, porque al fin y al cabo por mucha crítica que haya no deja de ser una peli muy blanca, pero de repente se hace patente un romance que hasta ese momento solo era unidireccional pese a que es evidente la química entre los personajes de Grant y Hepburn, lo cual no me pareció ni lógico ni natural.

En fin... que pese a todo Vivir para gozar es una película encantadora, pero que no termina de ser todo lo redonda que debiera, pese a estar llena de buenas intenciones y un reparto fantástico.

Recomendada a: fans del Hollywood clásico y los que aún crean en la libertad.

Lo peor: ese "no-romance" que termina siendo romance.

Lo mejor: un reparto maravilloso.