Que
Takashi Miike es una bestia cinematográfia todoterreno es algo que todo cinéfílo sin prejuicio sabe, pues es un director con cerca de 100 películas a sus espaldas en las que se alternan propuestas más personales y atrevidas con otras alimenticias, como
Phoenix Wright Ace Attorney, adaptación de una saga de videojuegos de Capcom para las consolas de nintendo en las que el jugador encarna a un abogado que debe ganar los juicios enfrentándose a los casos más rebuscados y hurgando en los testimonios más laberínticos.
He de reconocer que a mi me encanta la saga de videojuegos, por lo que acogí la llegada a España de esta película con muchas ganas y esperanzas, porque la historia da para un """"thriller"""" (sí, entre comillas) con muchos elementos cómicos, personajes muy carismáticos y mucho ritmo. Sin embargo, pese a un buen inicio en una sesión de espiritismo que lleva a un hilarante primer juicio en el que el tribunal más bien parece una lavanderia, la historia avanza a trompicones y perdiendo ritmo y aburriendo pese a algún golpe de humor.
Los personajes no son todo lo carismáticos que deberían: Narimiya Hiroki, Saito Takumi y Akiyoshi Nakao están perfectos tanto en su caracterización como en su interpretación de Phoenix Wright, Miles Edgeworth y Larry Butz respectivamente, el problema es que el resto de actores hacen frente como pueden a unos personajes totalmente desdibujados y carentes de interés, llevándose la palma Shunsuke Daito, siendo este un auténtico error de casting. No digo que no haga bien su trabajo, es que el inspector Gumshoe es un señor de cierta edad, duro y torpe y han escogido para interpretarlo a un yogurin que no pega con la idea del personaje ni con cola, aunque seguro que en Japón atrajo a los cines a un montón de fans con ganas de que se les empapara las bragas con cada una de sus apariciones.
Sin embargo el mayor defecto es un guión que, más allá del primer juicio me perdió para siempre: no genera interés, los personajes están tan desdibujados y son tan sositos que no se ganaron mi empatía, no hay emoción y no me hizo reír tanto como esperaba.
"¿Y por qué no he incluido la película en la sección '
sobrevivir a...'?" Puede que se pregunte alguno de vosotros. Pues porque a todo tiene algunos puntos muy buenos: los decorados y la mayoría de las caracterizaciones son igualitas a los videojuegos, los efectos especiales son la mar de llamativos y los actores los viven... y porque soy demasiado bueno, porque lo merece totalmente.
Recomendada a: fans del videojuego sin muchas expectativas y fans de Miike (también sin demasiadas expectativas).
Lo peor: un guión que no engancha ni interesa y unos personajes desdibujados.
Lo mejor: unas buenas caracterizaciones para la mayoría de los personajes, unos efectos especiales bastante dignos y unos escenarios idénticos a los del videojuego.
Lo + mejor: la mini subtrama del monstruo del lago y la pareja que se hace la foto con el bicho emergiendo de entre las aguas. Me deshorino vivo solo de recordarlos.